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Los manifestantes rompen el cordón policial que rodea el Parlamento ucraniano

Redacción.

Miles de manifestantes ucranianos han roto esta mañana el cordón policial que rodea al Parlamento, mientras que la policía disparaba pelotas de goma y bombas de humo para intentar contener su avance.

La escena ha tenido lugar en una de las calle aledañas al edificio del parlamento ucraniano cuando la policía ha intentado evitar el paso de una manifestación de los opositores que solicitaban el regreso a la Constitución de 2004, y al sistema presidencial parlamentario.

Los grupos parlamentarios opositores al presidente Yanukovich han exigido la restitución de la mencionada Constitución, habiendo obtenido como única respuesta la negativa a incluirlo si quiera en el orden del día a debatir.

La reforma constitucional emprendida por Yanukovivh, meses después de llegar al poder en 2010, convirtió el sistema político en presidencialista, con mayor concentración de poder en el jefe del Estado, en detrimento del poder legislativo.

Para el líder del opositor partido UDAR, Vitali Klitschkó, el regreso a la anterior constitución sería el primer paso imprescindible para resolver la crisis ucraniana. Además, la oposición considera necesaria la celebración de comicios presidenciales y parlamentarios anticipados.

Manifestaciones europeístas
Las protestas estallaron en Kiev hace tres meses cuando el actual gobierno retrasó la firma de del Acuerdo de Asociación con la Unión Europea.

Desde entonces, las manifestaciones en contra del gobierno y a favor de la entrada en la UE han ido en aumento y se han extendido a lo largo de diversas ciudades del país, sucediéndose de manera casi ininterrumpida en el centro de la capital.

La situación llevó al gobierno a aprobar una serie de medidas para restringir el derecho de manifestación y reunión, lo que llevo días después a violentos choques entre manifestantes y policías, con el trágico resultado de 6 muertos y cientos de heridos.

Las autoridades y la oposición iniciaron entonces un proceso de diálogo, que aún se desarrolla y aprobaron una amnistía para los manifestantes imputados por participar en los disturbios.


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