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Una fase en la transición de Afganistán (II)

Una fase en la transición de Afganistán (II)

Por Coronel D. Rafael Roel Fernández.

Jefe PRT ASPFOR XIV

Las actividades que llevaba a cabo el PRT se resumían en: Apoyo al Gobierno de la Provincia, Seguridad y Reconstrucción.

Para apoyar al Gobierno afgano, participábamos en reuniones con sus autoridades e Instituciones como el Consejo de Ulemas, SHURA y los Elders, hacíamos Campañas de Información Pública mediante carteles, periódico local y programas de radio, y finalmente apoyábamos a las diversas Jefaturas Provinciales en sus diversas competencias. Normalmente se implicaban en esta misión el Mando del PRT junto con su PLMM (Plana Mayor), el equipo CIMIC (Cooperación Cívico Militar) y los equipos de inteligencia.

Las actividades de Seguridad se realizaban fundamentalmente con personal de la Compañía de Protección y Seguridad (127 militares), el equipo EOD (6 zapadores) y el personal del TACP (9 militares) del Ejército del Aire.

Las misiones fundamentales de todo este personal fueron: escoltar los trabajos ó tajos del personal de AECID y sus trabajadores locales, patrullas a pie y vehículo por Badghis (capital de la provincia) y alrededores, controles esporádicos sobre vías de comunicación, acciones de presencia en los 7 distritos y la seguridad permanente de nuestra Base España.

Todas ellas fueron muy importantes, pero considero que las acciones de presencia en los distritos norte fueron las más difíciles. Los nomadeos ó patrullas se programaban para una duración de 3 días, debiendo pernoctar en bases improvisadas sobre la marcha al llegar el arco nocturno; debido a la meteo adversa y los problemas logísticos que surgían con los vehículos, lo normal era que se alargasen a 4 y 5 días teniendo que prever con antelación todo el problema logístico de alimentación, munición, repuestos vehiculares, trasporte del combustible en bidones en el interior de los camiones KAMAC etc….

Desde el inicio de la misión y con la finalidad de mostrar la presencia de ISAF y lograr crear un ambiente estable y seguro, intentamos sin éxito patrullar al menos una vez a la semana uno de los 3 distritos más distantes y peligrosos (alrededor de 7 horas de patrulla sin lluvias para llegar a estas zonas distantes como media unos 110 Kms); ello no fue posible debido a la meteorología adversa, al nivel de operatividad por causas de mantenimiento de nuestros vehículos y a las múltiples misiones que surgían en nuestro campamento base. Por poner un ejemplo, cada vez que se activaba el aeródromo por la llegada de algún avión ó helicóptero era necesario montar un servicio de seguridad compuesto de unos 50 militares durante unas 3 ó 4 horas, lo que obligaba a detraer personal de otras misiones como la escolta a los tajos de AECID.

El distrito de Gormach quedaba a unas 11 ó 12 horas de patrulla por caminos casi impracticables (160 Km,s). Se patrulló en contadas ocasiones, excepto al final de la misión que se llevó a cabo una importante operación en apoyo de la policía afgana, en el cual se reconocieron todos los valles y aldeas del distrito y se efectuaron acciones Psyops desde helicóptero mediante el lanzamiento de octavillas con mensajes de apoyo al gobierno afgano.

Las actividades de Desarrollo fueron realizadas por el personal de AECID a través de los trabajos de Reconstrucción. España comprometió para el periodo 2006-2010 unos 150 millones de euros. Además el equipo militar CIMIC (6 militares) llevó a cabo proyectos de rápido impacto (QiP,s) construyendo pozos de agua potable, reconstruyendo escuelas y repartiendo entre la población más pobre de la zona alimentos, libros, material escolar…; mediante estos proyectos se contribuía a crear seguridad para nuestros soldados de una forma indirecta generando mano de obra y estabilidad en dichas zonas; al estar las viudas totalmente desamparadas por aquella sociedad, fueron un objetivo importante para la entrega de ayuda alimentaria.

Las actividades más importante de Reconstrucción fueron: el hormigonado de la pista del aeródromo con una longitud de 2040 mts., rehabilitación y ampliación del Hospital Provincial, fortalecimiento del sistema de emergencias sanitarias mediante la entrega de ambulancias y medicinas, mejora de las vías de comunicación provinciales fundamentalmente la conexión con Herat (2ª ciudad del país), traída y acometida de una red de agua potable y saneamiento por todo Qala i Naw y entrega de maquinaria diversa al Parque de Material de Obras Públicas.

También AECID en íntima colaboración con los militares del equipo CIMIC, fomentaron el desarrollo económico y social mediante la integración de los colectivos vulnerables, en especial las mujeres; como ejemplo, en el interior de nuestra Base se organizó por espacio de unas 3 horas una reunión con mujeres afganas, donde nuestras militares (médico, ATS, logistas etc…) compartieron un rato de ocio y les explicaron medidas elementales de higiene personal y de alimentación e higiene con los niños. Al finalizar la reunión las afganas asistentes manifestaron que había sido el día más feliz de su vida. En el 2006 solamente en la ciudad de Herat se intentaron suicidar, quemándose, más de 300 mujeres.

Como ya cité en un párrafo anterior, la logística fue muy difícil y distinta a la que normalmente teníamos en nuestras habituales zonas de instrucción; debido a nuestra participación en socorro de la población en unas grandes inundaciones, llegamos a tener la operatividad de los vehículos por debajo del 40% y no fue la única ocasión. Nuestros camiones de 3/5 Tms no eran capaces de cumplir las misiones en la zona, motivo por el cual nos vimos obligados a externalizar el transporte para el nomadeo de nuestras unidades, mediante la contratación local de camiones KAMAC de 3 ejes; esta decisión fue un éxito rotundo tanto logístico como económico. De igual manera, el ingenio de nuestros magníficos especialistas logró habilitar un VAMTAC blindado en ambulancia de evacuaciones sanitarias dotándolo de una camilla y medios que facilitasen la atención en ruta a un herido.

Como resultado de nuestras experiencias en la zona de operaciones y además de la obligación de continuar respetando las costumbres, idiosincrasia e instituciones afganas, solicitamos de nuestros Mandos entre otras, un par de medidas a tomar:

  • Urgencia de la creación de una importante Base de Patrullas en el distrito de Bala Morghab
  • Al igual que había ocurrido en el norte de África a principios del siglo XX, instruir y dotar con medios a unas fuerzas indígenas que conozcan perfectamente la orografía

Ambas acciones fueron llevadas a cabo en contingentes posteriores con resultado muy positivo, pues la misión de ISAF caducará en el tiempo y son los afganos quienes tienen que responsabilizarse de estabilizar su país.

Finalmente un recuerdo muy emocionado y agradecido para nuestros compañeros fallecidos en aquellas lejanas tierras, en las que posiblemente se esté decidiendo el futuro del siglo XXI.


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