Redacción

Un turista canadiense, dos civiles jordanos y siete policías han fallecido tras un ataque de un grupo armado en un castillo de Karak (Jordania), en una fortaleza templaria del siglo XII. Se produjo un tiroteo mientras que catorce turistas malasios estaban visitando el castillo.

Las Fuerzas especiales de Jordania han rodeado el castillo, atrincherándose en él una decena de pistoleros. Pero los armados escaparon tras una persecución policial por todo el casco antiguo de la ciudad, según ha confirmado en Facebook, Hani al Mulki, primer Ministro jordano.

Además, se cortaron las carreteras y se desplegaron los equipos de vigilancia aérea. La Policía sospecha de un posible ataque terrorista y se mantiene en estado de máxima alerta.

No obstante, Jordania se ha mantenido estable con respecto a la violencia que reina en la región. El turismo representa el 14% de su PIB nacional.

La fortaleza, situada a 120 kilómetros del sur de Amán, es una de las más grandes que se conservan en Oriente Próximo.