Tras varios días de asedio, las tropas rusas han logrado tomar el control de la ciudad de Jersón, con 300.000 habitantes y ubicada en el sur del país. Se trataría de la primera ciudad de Ucrania importante en ser controlada por Moscú en esta ofensiva. La noticia ha sido confirmada por el Ministerio de Defensa ruso y más tarde por el alcalde de la ciudad, Igor Kolykhaev, a través un mensaje publicado en su cuenta de Facebook. Kolykhaev ha señalado que las tropas rusas tienen el control de la ciudad y de momento no hay soldados ucranianos.

“Las divisiones rusas de las fuerzas armadas han tomado el centro regional de Jersón bajo control total”, ha manifestado el portavoz del Ministerio de Defensa de Rusia, Igor Konashenkov, en declaraciones televisadas. También ha afirmado que los servicios públicos y el transporte funcionaban con normalidad: “La ciudad no está experimentando escasez de alimentos y bienes esenciales”, y ha agregado que se encuentran en conversaciones con las autoridades locales sobre el mantenimiento del orden, la protección de la población y el mantenimiento del funcionamiento de los servicios públicos.

Según las autoridades, las fuerzas rusas han intensificado su bombardeo a las ciudades ucranianas más grandes. Un enorme convoy militar ruso se encuentra en estos momentos a 25 kilómetros de Kiev y la ciudad ha amanecido esta mañana con sirenas de ataque aéreo. Los bombardeos sobre áreas residenciales en la ciudad oriental de Járkov han costado la vida de al menos 21 personas y otras cuatro en la ciudad occidental de Zhitómir.

Las autoridades ucranianas también han confirmado la muerte de otras cinco personas en un ataque ruso contra la sede de un medio de comunicación en Kiev. Estos ataques a áreas urbanas marcan un cambio de táctica por parte de Rusia, en medio de informes occidentales que señalaban que la invasión rusa se había estancado. Existe un creciente temor de que las tropas invasoras recurran a los bombardeos de áreas residenciales antes de entrar en ellas.

Olev Sinehubov, jefe del gobierno regional de Járkov, ha confirmado también al menos 112 heridos. “Todavía se están eliminando los incendios debido a los ataques aéreos, se están detonando proyectiles”, ha añadido.

Anton Herashchenko, asesor del ministro del Interior de Ucrania, ha informado en sus redes sociales que un misil de crucero ruso había alcanzado áreas residenciales en Zhitómir, a unos 120 kilómetros al oeste de Kiev. El misil parecía apuntar a una base cercana de la 95ª Brigada Aerotransportada en Zhitómir, y ha incendiado varios edificios residenciales. “Hasta ahora, cuatro personas han muerto. Incluyendo un niño”, ha declarado Herashchenko.

El número total de bajas desde que comenzó la invasión no está claro. La oficina de derechos humanos de las Naciones Unidas ha informado esta semana que, hasta ahora, se han confirmado 136 muertes de civiles, incluida la de 13 niños. Otras 400 personas han resultado heridas. El Ministerio de Sanidad de Ucrania había informado que 352 civiles habían muerto durante la invasión rusa, hasta esta semana. La cifra incluye a 14 niños. Por el momento no hay comentarios de Moscú.

Hace ya una semana desde que Rusia comenzó su invasión a Ucrania, lo que desde el Kremlin han calificado como una “operación militar especial”. «El propósito de esta operación es proteger a las personas que durante ocho años se han enfrentado a la humillación y el genocidio perpetrados por el régimen de Kiev. Con este fin, buscaremos desmilitarizar y desnazificar a Ucrania, así como llevar a juicio a quienes perpetraron numerosos crímenes sangrientos contra civiles, incluso contra ciudadanos de la Federación Rusa», han manifestado en redes sociales cuentas oficiales del Gobierno ruso.

Mientras tanto el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, ha declarado que Rusia debe de cesar con los bombardeos contra las ciudades ucranianas antes de que puedan comenzar verdaderas conversaciones sobre un alto el fuego, teniendo en cuenta que la primera ronda de negociaciones de esta semana ha resultado infructuosa. Al establecer sus condiciones para continuar con dichas conversaciones, Zelenski ha declarado que “es necesario, al menos, dejar de bombardear a la población, detener los bombardeos y luego sentarse a la mesa de negociaciones”.

En una entrevista Zelenski, desde un complejo gubernamental fuertemente custodiado en la capital de Ucrania, ha instado a los miembros de la OTAN a imponer una zona de exclusión aérea para poder frenar a la fuerza aérea rusa, afirmando que se trataría de una medida preventiva, y no de una forma de arrastrar a la alianza a una guerra con Rusia: “No se trata de arrastrar a los países de la OTAN a la guerra. La verdad es que todos han sido arrastrados a la guerra hace mucho tiempo y definitivamente no por Ucrania, sino por Rusia: se está produciendo una guerra a gran escala”.

Zelenski, que ha rechazado las ofertas de abandonar Kiev ante el avance de las fuerzas rusas, también ha manifestado que Ucrania exigirá garantías de seguridad si la OTAN cierra la puerta a un posible ingreso de su país en la alianza.

El bombardeo más intenso ha afectado a Járkov, cuyo centro se ha convertido en un páramo de edificios en ruinas y escombros. El techo de un edificio de la policía en el centro de la ciudad se ha derrumbado envuelto por las llamas. Las autoridades han confirmado 25 personas fallecidas por bombardeos y ataques aéreos en la ciudad en las últimas horas. Según han informado desde el centro operativo de las Fuerzas Armadas de Ucrania, un grupo de paracaidistas rusos ha aterrizado en Járkov, y añadieron que “han atacado el hospital, el Centro Clínico Médico Militar de la Región Norte”, comenzando una batalla entre los rusos y los defensores ucranianos. De acuerdo con el alcalde de la ciudad, actualmente la zona se encuentra tranquila, aunque continúan escuchándose disparos.

Por otra parte, la Asamblea General de las Naciones Unidas ha aprobado una resolución no vinculante condenando a Rusia por sus actos contra Ucrania y exigiendo su retirada inmediata. La votación ha contado con 141 países a favor, cinco en contra y 35 abstenciones. “La gente en Ucrania necesita desesperadamente la paz y la gente de todo el mundo la exige”, ha el declarado Secretario General de la ONU, António Guterres, en una entrevista tras la votación.