Sábado 30 de septiembre 2023. Día duodécimo

Hoy tenemos noticias en la que un soldado azerí ha sido abatido por disparos de un fusil de francotirador, se ha llegado a esta conclusión, probablemente, por la distancia existente entre la víctima y los posibles orígenes del disparo.

El Ministerio de Defensa azerí en un comunicado ha dicho que: «unidades del Ejército armenio abrieron fuego contra posiciones azeríes en la población de Zarkand del distrito de Basarkechar»; también ha indicado que tomará «medias de represalia». El ministerio de defensa ha calificado a la baja como «martir».

Por su parte, el Ministerio de Defensa armenio ha desmentido que el 30 de septiembre unidades de las fuerzas armadas de Armenia abrieran fuego en dirección a las posiciones azeríes en la parte oriental de la frontera.

Este tipo de incidentes, aunque esporádicos, están dentro de la dinámica de la situación y obedece a motivaciones individuales, acciones incontroladas o errores, rara vez están dentro de un plan de alcance superior; no es de descartar que se repitan. Está por ver en qué consistirán esas «medias de represalia» y el alcance de las mismas.

El ministro de exteriores de la autoproclamada República de Artsaj, David Babayán, que se entregó voluntariamente a las autoridades azeríes, ha sido acusado hoy de «planificar, preparar, iniciar y llevar a cabo una guerra de agresión, […] organización de actos terroristas y violar las normas del Derecho Internacional Humanitario», si pensó que su actividad en el campo diplomático no era punible, parece que se equivocó.

Mientras tanto, ya se dice que el 80% de la población armenia de Nagorno Karabaj ha abandonado la zona, lo que es un claro indicio del pánico de los armenios a los azeríes por motivos étnicos y religiosos, sin duda este medio está justificado por las experiencias conflictivas del pasado  entre ambas etnias.