El presidente Vladimir Putin ha presidido hoy los actos centrales en la celebración del Día de la Armada rusa en San Petersburgo, donde Rusia ha mostrado su músculo militar en un despliegue que ha movilizado a aproximadamente 4.000 militares y más de 80 barcos y aeronaves. Este año además el desfile cumple 80 años, desde que fuera instaurado en 1939 y suspendido por un periodo de 61 años hasta que el presidente Putin lo recuperase en el año 2003.
Putin ha aprovechado el espectacular marco que ha proporcionado el evento para anunciar el desarrollo de un plan nacional para la creación de “una flota única por sus capacidades” y al mismo tiempo ha querido destacar “el heroísmo de los marineros, el talento de los comandantes de flota y los especialistas en la construcción de barcos, la firmeza de los científicos y la audacia de los descubridores que depararon a Rusia una gran gloria marina”.
Paralelamente, el presidente ruso ha anunciado la inminente incorporación de 15 buques y cañoneras que se sumaran al grueso de la Armada rusa en el curso de este mismo año. Dichas incorporaciones, según ha precisado durante su discurso, vienen acompañadas por una actualización de su aviación marítima, de sus tropas costeras, de una mejora en la infraestructura de sus bases navales, y por la reanudación de las expediciones de circunnavegación mundial.
San Petersburgo, ciudad natal del propio Putin, ha sido el escenario elegido para acoger el desfile naval en el que han participado más de 4.000 efectivos y que ha movilizado hasta 43 buques y submarinos y 41 aeronaves. Encabezado por buque «Poltava», primer navío de línea ruso, el desfile ha contado con la participación de la fragata «Almirante Kasatónov», la corbeta de patrullaje «Gremiaschi», el submarino «Kronstadt», los buques de artillería ligera «Mytishchi» y «Sérpujov», y el dragaminas «Iván Antónov».
No hay ningún comentario