Redacción.
Desde el día de hoy, y a lo largo de las próximas cuatro semanas, serán juzgados en Francia los siete etarras acusados de los asesinatos de dos guardias civiles en 2007 en la localidad de Capbretón.
De los siete etarras que serán juzgados, tres de ellos; Mikel Carrera Sarobe (apodado Ata), Saioa Sánchez Iturregui (Hintza), y Asier Bengoa López de Armentia, podrían ser condenados a cadena perpetua si son declarados culpables de asesinato con premeditación. Los tres son integrantes del comando que perpetró el crimen.
A Sarobe también se le imputa el cargo de dirigente de una organización terrorista, como jefe de logística de la misma en el momento del asesinato.
El resto de acusados son Eider Uruburu Zabaleta, Ibon Goieaskoetxea Arronategi e Iratxe Sorzábal Díaz, esta última en busca y captura desde entonces.
Los asesinatos
Raúl Centeno y Fernando Trapero, los guardias civiles asesinados, habían llegado días antes desde Madrid para su misión en cooperación con los servicios secretos franceses. Los dos iban desarmados en el momento que los asaltaron.
Ambos recibieron impactos de bala en la cabeza, muriendo Raúl en el acto y quedando Fernando gravemente herido. Falleció cuatro días despues en el hospital de Bayona sin haber recuperado el conocimiento.
Los etarras se dieron a la fuga con el Peugeot 307 robado con el que habían llegado y posteriormente cambiaron a otro coche de la misma marca y modelo. Robaron el coche a una mujer a la que secuestraron temporalmente antes de abandonarla atada y amordazada en un pinar.
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