Redacción.
El Director General de la Policía Ignacio Cosidó, ha presentado hoy viernes en la reunión del Consejo de la Policía, el Código Ético que ha creado y que deberá servir como guía para dirigir el trabajo de la institución y su relación con la ciudadanía a la que sirven.
Se trata de un documento de 26 artículos, normas de carácter voluntario o recomendaciones sobre lo que debe ser una buena práctica policial.
Fuentes de la Dirección General de la Policía aseguran que se trata sólo de un borrador, y por tanto está abierto a las aportaciones de los sindicatos policiales y otros actores interesados.
El Código recoge algunas prácticas que resultan bastante obvias como que «la Policía debe actuar con la suficiente independencia respecto del poder político conforme a criterios profesionales y no de mera oportunidad política» o que «que «ninguna orden cuyo contenido constituya una infracción penal deberá ser cumplida». A este respecto asegura que no habrá represalias para aquellos agente que desobedeciesen una orden que fuera ilegal: «cada policía debe ser personalmente responsable de sus actos, de sus omisiones y, en su caso, de las órdenes dadas a sus subordinados. No incurrirá en responsabilidad el policía que incumpla una orden cuyo contenido sea ilegal».
También se recogen algunas recomendaciones referidas a las relaciones con la ciudadanía, que vienen muy al caso de los incidentes que se han registrado durante el último año en las numerosas manifestaciones y concentraciones en protesta por las medidas de recorte del gobierno: «el uso de la fuerza es una medida coactiva a la que sólo se puede recurrir en caso de absoluta necesidad y únicamente en la medida en que se requiera para conseguir un objetivo legítimo».
Pésimo recibimiento de los sindicatos
Antes de su presentación oficial en el día de hoy, diversos sindicatos policiales han mostrado su descontento con el contenido del código.
El Sindicato Unificado de Policia (SUP), uno de los mayoriatrios del cuerpo, lo ha tildado de «despropósito, pantomima publicitaria, reiterativo», demostrando su malestar porque no tenga rango normativo. Para el sindicato se trata de una «mera declaración de intenciones».
También la Confederación Española de Policía (CEP) ha considerado que las recomendaciones tienen sentido, no hay nada negativo en ellas, pero creen que no llegan en un buen momento y que el código debería haber sido redactado por el ministro del Interior y ser extensible también al Cuerpo de la Guardia Civil.
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