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“Defender la Academia de Suboficiales no se puede mezclar con la independencia de Cataluña”

Por Verónica Sánchez Moreno

El alcalde de Talarn, Lluís Oliva, militante de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), se muestra convencido al luchar por la permanencia de la Academia General Básica de Suboficiales en su pueblo, “no porque lo tenga que hacer, sino porque lo quiero hacer” y destaca que su desmantelamiento supondría una importante “desvertebración social”.

En la leridana comarca del Pallars Jussà se emplaza la Academia de Suboficiales del Ejército de Tierra español, con cuyo cierre  se está especulando, debido a cuestiones presupuestarias, desde la llegada del Partido Popular al Gobierno. El Observatorio de Inteligencia, Seguridad y Defensa ha hablado con Lluís Oliva, alcalde de Talarn, independentista y defensor convencido de la permanencia de la AGBS en su pueblo.

¿Qué ha supuesto y qué supone para Talarn la Academia General Básica de Suboficiales?

La AGBS, no sólo para el pueblo de Talarn sino para toda la comarca del Pallars Jussà, es más que una actividad económica, es una de las piezas de la comarca a nivel social. La pérdida de esta Academia puede suponer una desvinculación de muchas familias. Por ejemplo, yo no podría llegar a entender que por una cuestión política o puramente de gestión económica dejara de tener a mi vecino, que toda la vida ha sido un suboficial de la Academia, y esto trasciende a los arraigos familiares porque, siguiendo con el ejemplo, el hijo de este vecino está hoy en el consistorio formando parte de nuestro equipo de Gobierno.

Perder la Academia supondría una desvertebración social importante. Hay muchos arraigos, que durante todos estos años, una institución como la AGBS ha creado en el territorio, el hecho de su desaparición conllevaría unas fuertes connotaciones sociales.

¿Para qué ha servido la plataforma “Sí a la Academia de Talarn”?

Esta iniciativa fue una manera de unir diferentes movimientos en defensa de la Academia. A través de ella se ha conseguido tener un punto donde la gente puede expresar su deseo de continuidad de la AGBS. Más allá de las acciones que se llevan a cabo, como las recogidas de firmas, los lazos verdes o las concentraciones todos los miércoles en la plaza del Ayuntamiento, se han unido a través de la plataforma diferentes fuerzas y sensibilidades que por tener una vinculación directa con la Academia se han visto afectadas.

¿Si la Academia General Básica de Suboficiales se fuera de Talarn, qué ocurriría?

Si la AGBS se desmantelase la comarca se encontraría en una dificultad social porque de ella dependen muchas familias, y no sólo económicamente. El Pallars Jussà es una de las comarcas más deprimidas de Cataluña, ya que tiene una alta media de edad y poca densidad de población. Aquí no sólo estamos hablando de puestos de trabajo sino de vida, de pueblo, porque cuando una comarca cuenta con tan sólo 14.000 habitantes, podemos hablar de un único pueblo. Habría consecuencias educativas, con la reducción del 50% de los alumnos y de sanidad, ya que el hospital comarcal vería seriamente mermado su número de mutualistas y desaparecería, por ejemplo, el centro de diálisis que se inauguró hace algo más de un año.

Es de destacar que las consecuencias no son tanto a nivel económico. Este tema es importante, no por las consecuencias inmediatas del cierre de la academia, si no porque nos quedaría una instalación inmensa, con más de 100 edificios, imposible de mantener. Si la Academia se cerrase, se enterraría un capital social de futuro, el futuro de la comarca.

Usted es militante de ERC y defiende la permanencia en su pueblo de la Academia General Básica del Ejército de Tierra español, ¿ambas cosas son compatibles?

Me he presentado dos veces a las elecciones, la primera ocasión estuve en la oposición y esta segunda vez, cuando salí elegido. En ambas me presenté como independiente, bajo las siglas GT (Gente por Talarn). La política se hace dónde se hace y en los pueblos se tiene que hacer pueblo. Y mezclar según qué cosas es complicado. Nuestro grupo no sacó la voluntad del medio centenar de habitantes censados en Talarn, sino una proporción, pero como equipo de Gobierno nos debemos a todos, y lo primero es atender las necesidades de los vecinos.

A veces las convicciones de un partido político no las compartimos todos. Como alcalde tengo claro que hay que defender la permanencia de la Academia. Pero no porque lo tenga que hacer, sino porque estoy convencido de que lo quiero hacer.

Ante una posible independencia de Cataluña, ¿dónde quedaría la AGBS?

Como militante de ERC creo en el soberanismo de Cataluña, pero pienso que los alcaldes nos debemos a la mayoría de la población y a los intereses generales y si tuviéramos que pensar sólo en nuestras directrices políticas sería muy complicado llevar un ayuntamiento. Lo primero es el pueblo más allá de las directrices políticas. La política se hace dónde debe hacerse y en los pueblos se hace pueblo. Si en un pueblo se hace política, se pierden los arraigos, los pilares dónde está construido.

Cuando se habla de la Academia, la gente se refiere a ella como la Academia de Talarn. ¿Puedes entender un Talarn sin la Academia? Ésta se inauguró en los años ’60 y a los seis meses de su inauguración ya se decía que se iba a cerrar y después de tantos años se vuelve a repetir.

No sé si ahora se repite por su ubicación, que creo que no, o por temas económicos, algo que también dudo. Porque, si fuese únicamente una cuestión económica, es menos viable llevar alumnos de la AGBS a Segovia, a Hoyo de Manzanares o a Toledo, para que realicen allí parte de su instrucción, como se está haciendo ahora. Asimismo, es más económico centralizar la enseñanza de suboficiales de todos los cuerpos que desvertebrar la Academia. Como me dijo una vez un mando militar, “mis gastos van pillados a mi mochila”.

Quizás estamos hablando de un tema político y éste se vincula con el económico. Ahora Cataluña ha entrado en un proceso de soberanismo, pero desde poco después de la inauguración de la Academia ya se habló de su desmantelamiento. Por eso creo que los planteamientos de hoy de economía, de soberanismo, no son los que tocan, en todo caso son excusas.

Cuando se habla de Cataluña, de independencia, de Talarn y de Academia no es una regla de tres.  Son temas completamente distintos.  La AGBS en Talarn es un estamento y una parte más de nuestro territorio, de nuestro municipio, de nuestro pueblo, y todo lo demás se ha demostrado que puede convivir. Porque nadie puede decir que en Talarn la Academia ha sufrido ataques directos o que los alcaldes (mis predecesores en el cargo) no han estado a favor de su mantenimiento o que la población no ha apoyado a la AGBS. Ni ahora con problemas económicos ni hace cinco años cuando aquí nadie hablaba de economía.

Creo que el municipio no entiende esto porque no es verdad. Si me dices ¿Cataluña independiente puede tener una base militar española?, te diría ¿por qué no? ¿Por qué no puede tener un centro de formación español? Me hago una pregunta, si tuviésemos un ejército europeo, ¿alguien se cuestionaría esto? Yo creo que no.

 


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