Golpe a Resistencia Galega

Redacción/ Sevilla.

Agentes de la Policía Nacional, adscritos a la Comisaría General de Información, detuvieron el pasado lunes 7 de enero al presunto miembro de la organización terrorista Resistencia Galega, Adrián Mosquera Pazos. La organización estaba en fase de reestructuración tras las últimas detenciones.

Adrián Mosquera Pazos, nacido el 21 de julio de1985 en Ames (A Coruña), fue detenido en una zona boscosa de la localidad coruñesa de Ames, próxima a la ciudad de Santiago de Compostela. Esta zona estaba siendo controlada desde el mes de septiembre del año pasado, ante la sospecha de que en los alrededores  pudiera producirse alguna entrega de material explosivo o la existencia de algún depósito para guardarlo. En el momento de la detención, Mosquera Pazos llevaba consigo tres artefactos explosivos similares a los intervenidos en anteriores operaciones.

En estos momentos, el detenido se encuentra en las dependencias de la Policía Nacional en Canillas, Madrid, a la espera de ser puesto a disposición de la Audiencia Nacional.

Otro miembro de Resistencia Galega, Carlos Calvo Varela, detenido el 15 de septiembre de 2012, en Vigo cuando transportaba dos artefactos explosivos similares a los intervenidos a Adrián Mosquera Pazos, fue avistado por los investigadores en la zona de bosque en la que se ha interceptado a este último.

La detención de Adrián Mosquera Pazos, que también fue detenido en 2005 por pertenencia a banda armada, supone un duro golpe para Resistencia Galega y se suma a las realizadas en 2011 y 2012 en Vigo, Lugo y Santiago.

Todas estas operaciones contra Resistencia Galega han sido dirigidas por la Comisaría General de Información, en colaboración con las Brigadas de Información de la Jefatura Superior de Policía de Galicia.

La organización
El grupo, como tal, apareció el 20 de noviembre de 2005, cuando se publicó en Internet un escrito titulado Manifesto da Resistência Galega (Manifiesto de la Resistencia Gallega). En el texto se justifica la lucha armada y se apuesta por una resistencia sin siglas y anónima.

Tres días después de la publicación del manifiesto y en vísperas del Día de Galicia, una potente explosión en la oficina central de CaixaGalicia en Santiago de Compostela causa importantes daños materiales.

La organización se estructura con una veintena de pequeños grupos radicales que desarrollan su actividad en las zonas norte y sur de Galicia y proclama tener como objetivo la creación de un estado independiente y socialista en Galicia.


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