Redacción.

El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, inauguraba en el día de ayer la I Convención Nacional de la Unidad de Familia y Mujer (UFAM) con un acto que ha tenido lugar en el Complejo Policial de Canillas y al que han asistido agentes de toda España especializados en la lucha contra la violencia de género y la protección de las víctimas de estos delitos.

Durante su discurso, pronunciado en la víspera del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, el ministro ha calificado la violencia de género como «lacra social que duele e indigna a todos», recordando que la lucha contra este tipo de delitos, así como la protección de las víctimas del mismo ha sido una prioridad para su cartera desde que se hiciera cargo de ella.

Por otro lado, ha querido remarcar la importancia de esta nueva Unidad de Familia y Mujer de la Policía Nacional, ya que supone la aglutinación bajo la dirección de un mismo órgano policial de la investigación y protección de las mujeres víctimas de violencia de género. El objetivo de este cambio es el de coordinar de manera más eficaz todos los recursos con los que se cuenta, así como que las víctimas reciban una atención integral, continua y especializada.

Hasta el momento, las funciones que ahora asume la mencionada unidad eran desarrolladas por los Servicios de Atención a la Familia (SAF) en el ámbito policial, y por las Unidades de Prevención y Asistencia y Protección (UPAP), en el ámbito de la seguridad ciudadana.

En la actualidad hay 110 SAF distribuidos en toda España, en los que trabajan más de 800 agentes, y 173 UPAP con unos 600 agentes especializados en prevención, asistencia y protección a las víctimas. Con estas nuevas medidas, los Servicios de Atención a la Familia se extenderán a todas las Comisarías Locales de la Policía Nacional, lo que supone un incremento de 63 nuevos SAF.

Recuerdo a las víctimas
Jorge Fernández Díaz ha querido dedicar unos minutos de su intervención a recordar a las víctimas del drama de la violencia de género, asegurando que es imprescindible la implicación de toda la sociedad, ya que no es suficiente con el trabajo de las fuerzas de seguridad: «ante este problema hay que tomar partido y despreciar la neutralidad o el silencio, porque la pasividad favorece al opresor, nunca a la víctima».

Por otro lado, ha afirmado que en la lucha contra la violencia de género hay datos que «invitan a la esperanza», dando la siguientes cifras: en el periodo de enero a octubre de 2014 el número de victimizaciones conocidas por los juzgados de violencia sobre la mujer ha sido de 48.943 casos, 1.849 casos menos que en mismo periodo de 2011, lo que supone un descenso del 3,8%.