Redacción.

Un dispositivo desplegado por la Guardia detectaba  el numeroso grupo de inmigrantes que intentaban acercarse ayer a la valla de Melilla. Esta vez, no hay heridos.   

Las fuerzas de seguridad de Marruecos han resultado imprescindibles para frenar la tentativa, que se produce al día siguiente de que 150 subsaharianos intentaran saltar la alambrada. En este caso, 50 de ellos lograron entrar en la ciudad autónoma. El salto se saldó con 27 inmigrantes y 2 guardias civiles heridos.

Un portavoz de la Delegación del Gobierno declaraba para EuropaPress que «la estrecha colaboración entre las fuerzas de seguridad marroquíes y la Guardia Civil permitió detectar y reaccionar con anticipación ante los grupos, muy numerosos, de 300 inmigrantes en algunos casos, que intentaban aproximarse al vallado fronterizo». Los inmigrantes fueron avistados en las zonas de Farhana y Río Nano. Otro grupo menos numeroso, de entre 50 y 100 subsaharianos, fue visto por el Río de Oro.

Por su parte, la Guardia Civil, «conocedora de la extrema presión migratoria que ha comenzado a recrudecerse en los últimos días»,  ha desplegado un amplio dispositivo en la zona, reforzado por un helicóptero. Este refuerzo, unido a la colaboración de las fuerzas marroquíes, «permitió que finalmente ningún grupo se acercara prácticamente a la valla», aunque un grupo «próximo al centenar de personas, logró llegar casi a 50 metros del vallado, pero fue dispersado por las fuerzas marroquíes antes de alcanzarlo», según fuentes de la delegación.