«La pretensión final de la Generalitat es que se proclame ilegalmente la independencia de Cataluña». Con estas palabras el Rey, Felipe VI, ha abordado este martes la grave crisis institucional que se ha creado en Cataluña y que ha forzado la aparición del jefe del Estado en televisión.
«Hoy, la sociedad catalana está fracturada y enfrentada», aseguró el Monarca durante su comparecencia, en la que señaló directamente a la Generalidad catalana de «incumplir reiterada, consciente y deliberadamente las normas aprobadas legal y legítimamente, demostrando una deslealtad inadmisible hacia los poderes del Estado». La Generalidad, aseguró el jefe de Estado, «ha quebrantado los principios democráticos de todo Estado de Derecho» y «pueden poner en riesgo la estabilidad económica y social de Cataluña y España».
El cariz serio y contundente del monarca contrastó durante los seis minutos de duración con un mensaje cálido, dirigido hacia todos aquellos ciudadanos españoles que no se ven representados por los separatistas: «No estáis solos ni lo estaréis. Tenéis todo el apoyo y solidaridad de los españoles» y ha recalcado el firme compromiso de la Corona con la Constitución y la democracia. «En esa España que todos deseamos, estará también Cataluña», aseguró Felipe VI.
Durante la jornada de este martes, en la que se ha forzado una huelga general por parte del Gobierno autonómico de Cataluña, continúan los actos de acoso contra las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y la prensa, que ha sufrido, a las puerta del Parlamento catalán, un intento de agresión de los radicales independentistas catalanes al grito de «prensa española, manipuladora».
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