Carmelo Jesús Aguilera Galindo

En los últimos días ha saltado  las primeras páginas de los periódicos y a los titulares de los telediarios el nombre de David Petraeus por su dimisión como Director de la CIA por una relación extramatrimonial.

Es triste que ese sea el último recuerdo público de un hombre que durante 37 años dio lo mejor de sí sirviendo a su país como militar de carrera.

Nacido en 1952 en York, se licenció en West Point en 1974. En 1984 se gradua en la US Army Command and General Staff College, doctorándose después en la U. de Princeton en Relaciones Internacionales.

Tuvo su primera misión de combate en 2003 como Comandante de la 101 División Aerotransportada durante la Invasión de Irak, tomando de forma exitosa la cuidad de Mosul.

En 2005 fue ascendido a Comandante de Fuerte Leavenworth y de su Centro de Educación de Líderes donde reescribió el Manual de Contrainsurgencia de las FFAA norteamericanas, convirtiéndose dicho manual en la Biblia de las dos guerras abiertas por EEUU.

Posteriormente, fue de nuevo ascendido y se le ofreció el Mando de las tropas norteamericanas en Irak.

A partir de esa fecha el conflicto en Irak sufre un punto de inflexión a favor de las fuerzas occidentales. Se incidió en el cambio de estrategia en 2007 con el aumento de tropas en un número de 20000 soldados en dos bastiones: Bagdad y Anbar.

Con la implantación de la “Doctrina Petraeus” desaparecen las operaciones clásicas de infantería, pasando a ejercer operaciones mixtas armadas y acciones civiles para ganar “los corazones y las mentes” de la población civil como medio de contrarrestar las operaciones de los insurgentes iraquíes.

Tras el éxito, el General es nuevamente ascendido y nombrado Jefe del Comando Central (División del Pentágono que coordina las fuerzas norteamericanas en Oriente Próximo, Cuerno de África y Asia Central). Por tanto, coordinaba las 2 Guerras en las que EEUU estaba presente.

En 2009, en el discurso ofrecido en la Conferencia de Seguridad de Múnich, explicó su decálogo para el conflicto afgano, como Jefe del Comando Central:

• Ganar apoyo población
• Despliegues más inteligentes
• Promover la reconciliación
• Batalla de la información
• Política eficaz
• Perseguir al enemigo con tenacidad
• Legitimación de las autoridades locales
• Unidad de los esfuerzos
• Fidelidad de los valores
• Adaptación constante

Pero en 2010 tras el cese del General S. McCrhytal por el Presidente Obama y haciendo gala de nuevo de su amor por servir a su país, toma de nuevo el mando de las tropas en Afganistán (ISAF) hasta la fecha de su retirada del ejército. En ese momento fue distinguido con la medalla de Servicios distinguidos del Ejército, siendo en ese momento comparado con 2 de los mayores Generales de los EEUU como de la Historia Militar Mundial como fueron Marshall y Eisenhower.

El 28-4-2011 el Presidente Obama proclama su nombramiento como Director de la CIA, jurando su cargo el 6 de septiembre de 2011 hasta su renuncia el 9 noviembre de 2012 tras salir a la luz pública una relación extramatrimonial con su biógrafa Paula Broadwel.

Pero dejando aparte los asuntos de faldas, tenemos que quedarnos con la imagen en nuestra mente de un soldado que ha servido a su país durante 37 años, con su despedida en Fort Myer, a las afueras de la capital federal, para hacerse cargo de la Central de Inteligencia norteamericana en sustitución de León Panetta.

No olvidemos que en su día, la Revista Time, lo catalogó como el líder número 33 de 100, entre los líderes mundiales más influyentes.

Sobre los otros asuntos serán otras instancias y otras personas las que deberán juzgarle.