Redacción.
Según ha informado Europa Press, el ministerio de Defensa ha alcanzado un acuerdo con la empresa estadounidense Electric Boat por el que le pagará 14 millones de euros para que asesore a Navantia para resolver el problema en la construcción del submarino S-80.
En un principio este coste adicional del programa S-80 lo asumirá la Armada, pero según ha apuntado pedro Morenés más adelante habrá que llegar a un acuerdo con Navantia para ajustar el sobrecoste por las dificultades surgidas, y que además han obligado a una revisión total o gran carena al submarino Tramontana, que costará otros 30 millones de euros.
El programa supone la construcción de cuatro submarinos de esta nueva clase para la Armada, con un coste total de 2.135 millones de euros.
Navantia hizo públicos en el mes de mayo los problemas detectados en una revisión técnica, que desveló «algunas desviaciones relacionadas con el balance de pesos del submarino», que tiene un sobrepeso de unas 75 toneladas, lo que obliga a aplazar su entrega la menos hasta 2017. Según el Secretario de estado, sobrepeso que aunque excesivo, es normal en un proyecto de esta magnitud.
También en ese momento Navantia anunció que buscaría el asesoramiento de algún «socio tecnológico» para la evaluación del problema y las posibles soluciones al mismo.
Según fuentes de Defensa, ya se ha desplazado un primer equipo de técnicos de la empresa hasta Cartagena, para realizar una primera valoración de la situación.
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