Redacción
Las tareas de búsqueda de los tres tripulantes del helicóptero Super Puma del 802 escuadrón del Ejército del Aire accidentado el pasado jueves frente a las costas del Sáhara Occidental continúan hoy con efectivos españoles y marroquíes.
España y Marruecos están llevando a cabo diversas operaciones de búsqueda pues, según un portavoz autorizado del Ministerio de Defensa, “todas las posibilidades se analizan y evalúan con la misma fuerza porque aún no tenemos datos solventes para poder descartar absolutamente nada”.
Demasiadas hipótesis
Ante la imposibilidad de descartar alguna de las hipótesis que en estos momentos se barajan, el Ministro de Defensa, Pedro Morenés, reconoció que existe la posibilidad de que los tres militares españoles hayan sido secuestrados, si bien recalcó que esta hipótesis “no es la única factible ni la más plausible”. Morenés reconoció que el Centro Nacional de Inteligencia, CNI, se ha hecho cargo de estudiar la posibilidad del secuestro pero no dio más información “por razones obvias”.
Dentro de esta hipótesis, se baraja la posibilidad de que el pesquero que en un principio se afirmó que había rescatado a los militares españoles pudiese ser, en realidad, un cayuco con delincuentes que hubiesen retenido a los tres tripulantes. Por ello, el Ministro señaló la posibilidad de ampliar la zona de búsqueda a “toda la costa occidental de África” donde, a pesar de la existencia de misiones internacionales, sigue habiendo una importante red de piratería, narcotráfico y tráfico de seres humanos.
Otra posibilidad es que los militares fuesen rescatados por un pesquero sin control CIR, un sistema de GPS que permite la localización y la comunicación con las embarcaciones. Teniendo en cuenta la precariedad de los barcos de pesca de la zona, muchos de ellos cayucos, existe la posibilidad de que los tres militares se hallen a salvo en un pesquero ilocalizable.
Asimismo, la tripulación del helicóptero podría haber activado una de las balsas salvavidas que se encuentran a bordo del aparato y estén, en estos momentos a la deriva. El problema de esta hipótesis es el hecho de que, si bien la baliza del helicóptero fue activada, ninguno de los tripulantes activó la baliza que llevan encima. Además, en los últimos días ha habido tempestad en la zona por lo que cada hora que pasa se hace más peligroso estar a la deriva.
Por último, existe, también, la posibilidad de que los tres tripulantes falleciesen durante el accidente y sus cuerpos quedasen atrapados en la cabina del helicóptero.
Puerto a puerto y playa a playa
En las tareas de búsqueda participan trescientos efectivos de la Armada y del Ejército del Aire con la colaboración de Marruecos. Entre las diversas operaciones que se están conduciendo de manera paralela se encuentra el rastreo de todos los puertos y playas próximos al lugar del accidente. Marruecos está inspeccionando todos los puertos, comprobando qué barcos han regresado a puerto y controlando todos los pesqueros atracados en los últimos días.
En busca del helicóptero
Junto con ello, se está llevando a cabo un rastreo militar frente a la costa del Sáhara Occidental y que, probablemente, se amplíe a Mauritania y Senegal. El Ministro de Defensa informó que se están empleando dos criterios geográficos en este rastreo.
En primer lugar, una zona de rastreo más intensa en un área de unos veinte por veinte kilómetros alrededor del lugar en el que se activó la baliza del helicóptero, y en el que se están teniendo en cuenta las corrientes marinas para su delimitación, lo cual explica el posible retraso en localizar el aparato.
En segundo lugar, en una zona de unos cuatrocientos por sesenta kilómetros, aviones Casa se encargan de localizar pesqueros y otras embarcaciones.
En las tareas de búsqueda participan el buque de transporte ligero “El Camino Español”, dos patrulleras marroquíes, dos submarinos y la embarcación “Olimpic Zeus”, teniendo esta última catorce buzos y dos robots submarinos. Esta embarcación noruega fue contratada por el Ministerio de Fomento para sellar las fugas de fuel del “Oleg Naydenov”, el pesquero ruso que se hundió en abril frente a las costas de Canarias.
A pesar de encontrarse a cuarenta y cinco kilómetros de la costa, el Ministerio de Defensa aseguró que la profundidad ronda los cuarenta metros, por lo que los buzos pueden bajar. Sin embargo, la tempestad en la zona está dificultando las tareas de búsqueda y hay mala visibilidad bajo el agua.
El Ministro informa personalmente a las familias
En el helicóptero viajaban el capitán José Morales Rodríguez, el teniente Sául López Quesada y el sargento Jhonander Ojeda Alemán, único superviviente del accidente que sufrió otro Super Puma del Servicio de Búsqueda y Rescate del Ejército del Aire.
El Ministro se encuentra en Gran Canaria, donde se espera que permanezca, al menos, hasta mañana. Por tanto, la idea de Morenés, según informó un portavoz de Defensa a Europa Press, es ausentarse del Consejo de Ministros de hoy en el que se aprobará el decreto de convocatoria de las elecciones generales, salvo que el Presidente requiera su presencia.
Francisco Ojeda, padre de uno de los tripulantes desaparecidos, afirmó que el propio Ministro les está ofreciendo toda la información de primera mano. Por el momento, el caso está ya en manos del titular del Juzgado Togado Militar número cincuenta y dos de las Palmas que ha decretado el secreto de todas las actuaciones.
Dos accidentes en dos años
Tras ser preguntado sobre el hecho de que dos helicópteros Super Puma del 802 escuadrón del Ejército del Aire hayan tenido un accidente en tan poco tiempo, el Ministro dijo considerarlo como algo “enormemente duro” pero recordó que “la realidad de los hechos físicos” es que la comisión encargada de investigar el accidente de 2014 “ya dictaminó cuáles eran las causas, y no eran las infraestructuras tecnológicas”.
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