Redacción.
El gobierno australiano ha adjudicado finalmente a Navantia la construcción de dos buques logísticos para su Marina por un coste de 700 millones de euros, que serán entregados entre 2019 y 2020.
Han sido casi cinco años de trámites hasta que hace dos meses la empresa española fue elegida como licitador preferente por el departamento de Defensa australiano, desbancando así la competitiva oferta de Corea del Sur (astillero Daewoo), país que mostró su molestia por esta circunstancia, al considerarse socio preferente de Australia.
El contrato se firmó la pasada semana e incluye la construcción de dos buques petroleros y de suministros de clase “Cantabria” (muy similares al BAC ‘Cantabria’, de la Armada española, construido en el astillero de Puerto Real), de 19.500 toneladas cada uno de ellos. El destino de las naves es sustituir a los que actualmente tiene la armada australiana: HMAS ‘Success’ y HMAS ‘Sirius’. Los nuevos buques tendrán capacidad para servir de plataforma de helicópteros medios y pesados, transporte de material, recibir líquidos y sólidos, proporcionar asistencia sanitaria y almacenar residuos sólidos de otras embarcaciones
La obra se llevará a cabo principalmente en el astillero de Ferrol, a partir de junio del año próximo, con una estimación de que en los 4 años ininterrumpidos de trabajo puedan operar hasta 3.000 empleados. No se descarta, asimismo, la participación de la participación del astillero de Cádiz ara la fabricación de algunos bloques.
En caso de que a la empresa pública le fuera adjudicada la construcción de cinco corbetas por parte de Arabia Saudí (el contrato esta en negociación) la dirección tendría que redistribuir la carga de trabajo entre ambos astilleros.
Cliente prefrente
No es la primera vez que el país oceánico realiza un encargo a la empresa española, de hecho se está convirtiendo en uno de sus clientes preferentes.
Desde 2007, Navantia ha construido para la Armada australiana dos buques de proyección estratégica (el “Camberra” y el “Adelaide”), y doce lanchas de desembarco. Este encargo supuso una inversión de 1.400 millones de euros. Actualmente construye tres destructores por valor de 1.185 millones de euros y se encuentra, junto a otras dos empresas, en la lista final de candidatas para la construcción de nueve fragatas, a partir del año 2018.
Tras la adjudicación de este último encargo, Australia se ha convertido en el principal inversor de la empresa pública española.
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