Redacción.

Al menos cuatro israelíes han muerto en el ataque terrorista a una sinagoga y una escuela talmúdica en Jerusalén.

Los atacantes, armados con hachas y cuchillos (y según algunos medios con pistolas), irrumpieron en el complejo de edificios religiosos poco antes de las 7 de la mañana, hora en que se celebra el primer rezo. Entraron en la pequeña sinagoga donde ya se reunían muchos fieles para la oración y cargaron contra ellos.

Como resultado del ataque cuatro israelíes han muerto y otros ocho han resultado heridos, de los que cuatro se encuentran en estado grave. Los dos agresores resultaron muertos al ser abatidos por la policía.

Aunque aún no ha sido confirmado por las autoridades, los vecinos de la zona aseguran que los dos atacantes eran árabes que trabajaban en ese mismo barrio; uno de ellos era limpiador en el propio complejo religioso, mientras que el otro trabajaba en un supermercado de una calle cercana. La Policía está analizando el coche en el que ambos llegaron a Har Nof, para conseguir huellas.

Según ha informado el portavoz de la Policía, Micky Rosenlfed, la primera hipótesis que se baraja es que se trate de un atentado terrorista: «estamos considerando esto como un ataque terrorista».

Aumento de la tensión
Los últimos enfrentamientos en Gaza y por el acceso de los judíos a los lugares sagrados ha provocado un aumento de la tensión entre judíos y palestinos. En las últimas semanas han muerto 9 israelíes y un extranjero como consecuencia de ataques de radicales palestinos.

Por su parte, las fuerzas israelíes han matado a decenas de palestinos. Desde el pasado mes de julio la violencia entre ambas comunidades ha ido en aumento a raíz de que un adolescente palestino fuera quemado vivo por varios asaltantes judíos, en respuesta al secuestro de tres israelíes en Cisjordania.