Redacción.

Un solo hombre, a punta de pistola, ha robado este domingo el mayor botín de la historia de Francia durante una exposición de joyas en el lujoso Hotel Carlton de Cannes.

A plena luz del día, durante la exposición «Extraordinary Diamond» que tenía montada en un hall del hotel la firma de joyería Leviev, el hombre se ha llevado joyas por valor de 103 millones de euros, según ha informado la Fiscalía.

Al mediodía, y antes de que la exposición abriera sus puertas la público, el hombre irrumpió en el hall con un arma, guantes y la cara tapada por una gorra y un pañuelo, llenando varias bolsas de joyas, de manera rápida y sin ejercer violencia alguna. Se llevó un total de 72 piezas de la exposición.

Cannes vuelve así a ser escenario de un robo de película, tras los que se sucedieron durante la pasada primavera cuando se celebraba el prestigioso festival de cine.

En esta ocasión, y contrariamente a lo que es habitual, la firma de joyería no había avisado de la celebración de la exposición a la policía local, algo que no es obligatorio pero que sí se suele hacer.

Leviev contaba para la exposición con guardias de seguridad privada, según la prensa unos 3 o 4 hombres. Pocos si se piensa en la envergadura de la misma.