Redacción/ Sevilla.

Parte de las armas que fueron robadas el pasado año en la base militar “General Menacho” en Bótoa (Badajoz) han sido halladas en dos fincas rústicas de la zona. La Guardia Civil continúa con las labores de investigación del resto de armas hurtadas

Con el desmantelamiento de una organización criminal el pasado mes de junio, la Guardia Civil recupera parte de sus armas, en concreto 14 fusiles HK y cuatro pistolas Llama, que iban a ser vendidos. Esta organización ha sido presunta autora de más de cien robos mediante el uso de la fuerza en las provincias cercanas, con el posterior robo de las armas de la base.

Tanto los miembros de las Unidades Centrales de la Guardia Civil como de la Comandancia de Badajoz se trasladaron a la zona nada más producirse el robo para proceder a la investigación. Una vez llevada a cabo las investigaciones pertinentes, la Guardia Civil encontró indicios de sospechas en un grupo organizado asentado en Badajoz, centrados en el robo de entidades bancarias, estancos, gasolineras y empresas de las provincias de Salamanca, Cáceres, Badajoz, Huelva y Sevilla. En todas sus actividades delictivas empleaban butrones.

En la fase de investigación –llevada a cabo por Unidades Centrales de la Guardia Civil especialistas en investigaciones contra el crimen organizado y agentes del mismo Cuerpo de la Comandancia de Badajoz-, miembros de la Guardia Civil realizaron 10 registros domiciliarios en Mérida, incautando diverso tipo de material: revolver, dinero y documentación. Por esta razón, la Autoridad Judicial decretó el ingreso en prisión para siete de los once arrestados.

Actualmente, la Guardia Civil continúa con las labores de rastreo para localizar el resto de armas sustraídas.