Verónica Sánchez Moreno
Unos 200 españoles quedan aún en la base afgana de Herat, una presencia mínima comparada con los 1500 efectivos que se desplegaban en Afganistán hace tres años. La operación de repliegue, que previsiblemente culminará el año que viene con la retirada total de las tropas españolas del país ha supuesto el mayor reto logístico al que se han enfrentado las Fuerzas Armadas. Al frente de esta operación, el general jefe de la Fuerza Logística del Ejército de Tierra (FLO), el general de división Francisco Javier Abajo Merino, en el cargo desde junio de 2012.
Hacemos un repaso de cómo se está desarrollando el repliegue con este burgalés de 58 años, que en 2004 fue el jefe del Grupo Táctico español que se desplegó en el país afgano durante el proceso de elecciones y en 2008 fue designado Jefe de Estado Mayor del Mando Regional Oeste en Herat. “Al hablar de logística no solo debemos pensar en buscar la eficacia sino también la eficiencia”, afirma, “el nervio de la guerra no es el dinero, sino la logística; si no se ha previsto una buena logística, cuando comience un conflicto no habrá tiempo de transformar dinero en logística”.
¿En qué situación se encuentra actualmente el repliegue de las Fuerzas Armadas españolas de Afganistán?
El Ejército de Tierra ha replegado todas sus unidades a excepción de una unidad logística y la de aviones no tripulados, que tiene previsto su repliegue durante este verano. No obstante, se dispone en la base de Herat del material para dotar a una unidad de respuesta inmediata.
Por otro lado, el Ejército del Aire ha replegado algunas de sus unidades, disponiendo en la base de Herat (FSB Camp Arena) de la jefatura de la base, los servicios aeroportuarios correspondientes y un hospital con capacidad ROLE 2E.
El repliegue de las tropas españolas de la provincia afgana de Bagdhis se inició a principios de 2013 y terminó el pasado mes de septiembre, ¿cómo se desarrolló?
El repliegue se desarrolló con total normalidad, debido, en parte, a la antelación con la que se produjo el planeamiento previo en los Cuarteles Generales en territorio nacional, unido a la fuerte concienciación y preparación de los distintos contingentes que participaron y ejecutaron el mismo.
Aunque la mayor parte de las acciones del repliegue se realizaron en el 2013, el planeamiento comenzó en el 2012, y aproximadamente a partir del mes de julio de ese año se comenzaron a realizar acciones propias del repliegue, como el cierre de uno de los puestos avanzados de combate y la modificación de la estructura y entidad de algunas unidades.
Desmontar y replegar los dos puestos avanzados de combate de las localidades de Ludina y Moqur, ¿fue especialmente delicado?
El desmontaje y el repliegue de los Puestos de Combate Avanzados (COP) fue realizado como una operación militar más, por las fuerzas desplegadas en la provincia de Badghis. El planeamiento en detalle realizado y la precisión con la que se produjo el mismo facilitaron enormemente la labor.
Las operaciones de desmontaje fueron precedidas por un aumento en las misiones de seguridad realizadas en la zona. Asimismo, las gestiones realizadas por los contingentes para facilitar la transferencia de los terrenos del ejército afgano evitaron tener que desmontar todos los elementos de seguridad de los COP, y abarataron considerablemente los costes de la misión de desmontaje y de repliegue.
Tras ello, el traslado del material a Herat por la ruta Lapis y, de ahí a España, ¿cómo se ha realizado?
El traslado de material desde la base Ruy González de Clavijo hasta la FSB (Base de Apoyo Avanzado en sus siglas en inglés) de Herat se realizó principalmente a través de medios terrestres, reforzando las capacidades de transporte militares mediante el uso de plataformas civiles alquiladas. El transporte terrestre se complementó con las capacidades aéreas disponibles para agilizar el traslado. Se organizaron convoyes periódicos para trasladar el material desde la PSB (Base de Apoyo Provincial en sus siglas en inglés) hasta la FSB, las unidades de combate se trasladaron con sus medios a Herat.Desde la FSB de Herat, y en función del tipo de material a replegar, se trasladó por vía aérea directa a España (el material más sensible), a través de una ruta multimodal aéreo-marítima, desde el aeropuerto de Herat al aeropuerto de Azerbaiyán o Emiratos Árabes Unidos, y de allí en barco hasta España, o a través de una ruta multimodal terrestre – marítima, desde Herat por carretera hasta el aeropuerto de Karachi y desde allí en barco hasta territorio nacional.
¿Cómo ha sido y está siendo la coordinación entre Fuerza Logística Operativa del Ejército de Tierra (FLO) y Mando del Apoyo Logístico del Ejército del Aire (MALOG)?
La FLO ha recibido todas sus directrices de la cadena de mando de Ejército de Tierra, no habiendo realizado ninguna coordinación directa con el MALOG y el Ejército del Aire. Todas las relaciones entre el Ejército de Tierra y el Ejército del Aire se han realizado a través del Mando de Operaciones (MOPS).
¿Cuál será el volumen total de material trasladado cuando finalice el repliegue en 2015?
El repliegue de Afganistán ha supuesto un importante esfuerzo de transporte. Por las distintas rutas expuestas anteriormente se han movido hasta España 309 contenedores de carga de veinte pies y 237 vehículos o medios de distintos tipos, que por su peso o dimensiones no ha sido posible introducir en contenedores. A todo este material habrá que añadir el material del Ejército de Tierra preposicionado actualmente en Herat, aproximadamente otros 100 contenedores de carga y unos 30 vehículos.
¿Qué material e instalaciones se están dejando para que hagan uso de ello las autoridades afganas?
Al replegar las fuerzas de la provincia de Badghis se realizó un reconocimiento previo de las instalaciones y servicios que había en la base Ruy González de Clavijo (PSB). Como consecuencia del reconocimiento, y tras el estudio correspondiente en territorio nacional, se clasificó el material en replegable o no replegable.
De entre el material que no era rentable replegar se determinó aquel necesario para el correcto funcionamiento de la PSB, donándose al Ejército Nacional Afgano y dejando en perfecto estado de funcionamiento la Base.
¿Cuáles son los retos a los que se han tenido y se están teniendo que enfrentar en esta operación de repliegue, la mayor de las Fuerzas Armadas hasta este momento?
El reto más importante al que nos hemos enfrentado en la operación de repliegue ha sido el control del material a repatriar y su correspondiente adecuación (mantenimiento) a los estándares de operatividad presentes en territorio nacional, no siempre similares a los de Zona de Operaciones.
Usted ha participado en misiones de las Fuerzas Armadas en los Balcanes y Afganistán, ¿cómo ha sido su experiencia?
Aunque cada misión es diferente a la anterior, todas constituyen una experiencia inigualable y una ocasión excepcional para poner en práctica los conceptos aprendidos durante toda una vida profesional. Fundamentalmente proporcionan una experiencia de mando y responsabilidad que difícilmente se podrían obtener, con la misma intensidad, en otra situación.
¿Cuáles son los retos de futuro a los que se enfrenta la Fuerza Logística Operativa?
Visibilidad, integración y, sobre todo, anticipación son conceptos que debe prevalecer en cualquier escenario logístico, operativo o doméstico y sobre los que se basa nuestro adiestramiento para conseguir una mayor interoperabilidad entre los elementos que constituyen la FLO y con el resto de formaciones logísticas.
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